Precipitaciones ácidas en la zona metropolitana de la Ciudad de México
Informe anual 1996
Descripción
En las áreas urbanas el agua de lluvia es influenciada por fuentes naturales y antropogénicas. Polvos y partículas provenientes de suelos erosionados, de campos de cultivo barbechados, de áreas no pavimentadas y carentes de vegetación, así como la emisión de contaminantes asociados con la quema de combustibles fósiles que consumen los vehículos automotores, las industrias, los comercios y servicios, originan la formación de compuestos ácidos que contribuyen a modificar significativamente la composición natural del agua de lluvia. Durante la temporada de lluvias 1996, en los sitios localizados en la zona suroeste (Lomas, Pedregal y Felipe Ángeles) se registraron los valores de pH más bajos del agua de lluvia. Manifestándose así, la presencia de precipitación ácida en esta zona. Sin embargo, existen aspectos inciertos asociados a éste problema ambiental en la ciudad; ¿hasta donde abarca el área geográfica, en la cual el pH del agua de lluvia es ácida?, ¿existen daños?, ¿cuáles son la tasas de acidificación?